Como ya se ha visto, en la actualidad es muy importante el tema del reciclaje y en Super Copy no somos ajenos a este, todo lo contrario. Adentrémonos un poco en el tema.
Si ya tienes tiempo con tu impresora, habrás notado que hay momentos en los que a tus impresiones les empieza a faltar color o tonalidad; en algunas ocasiones, empiezas a ver un mensaje recurrente de tu impresora indicando la necesidad de remplazar cartuchos o, en la peor escena, tu impresora se niega a trabajar por falta de uno o varios cartuchos (normalmente los domingos por la noche a mitad de una tarea o trabajo).
La primera opción es correr al centro comercial más cercano a comprar un cartucho nuevo y así poder regresar al trabajo, pero ¿qué pasa con el cartucho que dejaste de usar?, ¿Simplemente se acabó su vida útil y se va a la basura?, NO. Dependiendo del tipo de cartucho que sea, este puede ser reutilizado de 1 a varias veces más y por un costo, en su gran mayoría, inferior al 50% del de un cartucho nuevo.
Esto es en base a RECARGAS y REMANUFACTURAS. En la primera (la más económica también), a grandes rasgos se incluye el servicio al cartucho (limpieza) y el suministro de materia prima (recarga de tinta o tóner) y en la segunda, aparte de realizar estas mismas acciones, se cambian todas las piezas mecánicas del cartucho que pueden degradar la calidad de impresión.
Existen diferencias abismales entre las principales tecnologías (inyección de tinta y laser o tóner) debido a la constitución de cada cartucho.
En la tecnología de inyección de tinta no se pueden realizar remanufacturas debido a que no tienen piezas mecánicas que afecten la impresión y debido a que cabezales de impresión y circuitos de conteo de impresión (chip) vienen integrados en el cuerpo de muchos cartuchos, estos no se pueden cambiar, lo que limita la cantidad de recargas y en determinadas circunstancias las hace imposibles al punto que en modelos recientes se recomienda máximo una recarga ya que, además de esto, una vez no siendo reconocido el cartucho por la impresora, por lo general, hay que cambiar de cartucho.
En cambio en la tecnología láser casi no se tiene este problema ya que la gran mayoría de sus piezas se pueden cambiar.
En la recarga de esta tecnología se incluye el servicio del cartucho que consta de limpieza y desecho de unidad residual (todos los residuos que pudieran contaminar el nuevo tóner, como el tóner “viejo” sin usar y los dejados por el papel y tóner quemado), el suministro de materia prima (tóner) y cambio de memoria/contador de impresiones (chip) para que la impresora lo reconozca como nuevo.
Por su parte en la remanufactura, adicional a lo que se hace en la recarga, se sustituyen piezas que estén generando una mala calidad en la impresión, como pueden ser rodillos, cuchillas, engranes, etc., que son piezas que por su uso tienden a desgastarse fácilmente.
En esta tecnología un promedio de vida de las piezas va a partir de 2,000 impresiones (por lo general 2 recargas) pero todo depende del modelo del cartucho, algunos tienen promedios de vida de más de 10,000 impresiones, después de las cuales se recomienda la remanufactura.
Adicional a esta información, hay que tomar muy en cuenta que los cartuchos que vienen con una impresora nueva, la gran mayoría de las veces, son cartuchos “demo” o “setup” y vienen limitados al 75% o menos de la capacidad y tiempo de vida de un cartucho estándar, por lo que se recomienda cambiarlos o recargarlos solo para emergencias.
Pero ya sea que busques un cartucho original, un genérico, una recarga o una remanufactura, en Super Copy tenemos una gran variedad de marcas y precios, todo con la calidad que nos distingue, acércate a nosotros y permítenos ser parte de tu equipo de trabajo.